En aquellos lugares dónde no llega el suministro de gas natural o propano y por lo tanto deben calentar a través del sistema eléctrico, supone una ventaja importante disponer de este tipo de bombas.
La electricidad sufre de continuas oscilaciones en su precio y disponer de una bomba de calor acs supone no tener que preocuparse de ellos para garantizar el confort energético. Esto es así porque aunque también funciona mediante electricidad, aproximadamente las tres cuartas partes de la energía que consume para funcionar proceden de la aerotermia y por lo tanto son gratuitas. Esto lo convierte en una solución eficiente y limpia.
Hay que señalar que desde la implantación del nuevo código técnico de edificación, los edificios nuevos deben tener instaladas las bombas acs. Esto es así porque su implantación se basa en conseguir que los nuevos edificios sean nulos energéticamente.