Tenemos la caldera que necesitas, sean cuales sean tus necesidades.
Cambia o instala tu caldera y empieza a disfrutar de un confort a menor precio.
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En el mercado hay muchas calderas y puede que te parezca complicado elegir la más conveniente. Además, hoy en día poco tienen que ver con las que había antes, de hecho, podríamos hablar de una nueva generación de estos aparatos. Más seguros, más eficientes y en suma mucho mejores.
Tampoco es lo mismo elegir una caldera para un chalet en las afueras, que para un piso en un bloque nuevo. O contar con una instalación solar que no hacerlo.
Uf… mirando nuestro catálogo parece imposible poder elegir una entre tanta variedad de calderas, ¿verdad?
Esa es una de las grandes ventajas de trabajar con nosotros. Nuestro equipo está formado para conocer todos los productos y sistemas que tenemos a la venta y de esta manera poder elegir cual es la mejor para tu local o vivienda.
Si estás buscando una, te habrás dado cuenta de la cantidad de calderas que hay. En realidad es relativamente simple, una caldera no es ni más ni menos que un depósito cuya misión es calentar agua utilizando diferentes combustibles. Te explicamos los diferentes tipos y sus características:
En este caso, se utiliza como combustible el gas, generalmente gas natural, aunque hace años también había de propano. A través de la combustión del gas se calienta el agua que tienen dentro y que se distribuye a través de los circuitos instalados para suministrar agua o calefacción. Por lo general, cuando el agua entra en el circuito de los radiadores vuelve de nuevo a la caldera aprovechando así el calor residual.
La mayoría de las que se instalan hoy en día son lo que se llaman calderas estancas, es decir, que su cámara de combustión está cerrada y no consume el aire de dónde están instaladas. Esto las hace más seguras.
Aunque normalemente las asociamos con las anticuadas calefacciones centrales, las calderas de gasoil son un producto con amplia demanda en aquellas zonas en las que no hay suministro de gas. Evidentemente han evolucionado a lo largo del tiempo y los modelos actuales son mucho más eficientes y menos contaminantes.
Aunque se consideran como una categoría aparte, diríamos que son un sistema aparte, puesto que pueden ser tanto de gasoil como de gas.
Lo que las diferencia es que aprovechan el calor del vapor del agua que se forma en la combustión a través de su condensación. De esta manera el rendimiento de la combustión es mucho mayor que en las convencionales. Consiguen mayor eficacia a la hora de producir agua caliente sanitaria y en combinación con los sistemas más eficientes de calefacción como el suelo radiante o radiadores de baja temperatura.
Se calcula que la instalación de una caldera de este tipo puede suponer un ahorro del 30% en el gasto de gas o gasoil.
Es el sistema de calefacción más respetuoso con el medio ambiente ya que el calor se produce mediante la combustión de elementos fósiles biodegradables y generan menor contaminación.
Normalmente se queman pellets (aglomerado de restos de serrín) o leña, astillas e incluso huesos de aceitunas. Se trata de materiales baratos, poco contaminantes y de gran valor calorífico. Son diferentes en función del combustible a utilizar y es posible transformar una caldera diesel en una caldera de biomasa.
En contrapartida, hay que decir que es prácticamente imposible la instalación de este tipo de calderas en pisos o locales situados en edificios plurifamiliares y que no siempre es posible conectar la caldera al circuito existente para que el calor se distribuya a lo largo de todo el espacio.
No. Definitivamente no. Da igual cual sea el sistema de combustión elegido. La instalación debe llevarse a cabo por personal especializado y debidamente acreditado que además debe certificar al finalizar que la instalación está en orden y todo bien hecho.
No disponer de este certificado puede traer consecuencias graves en caso de accidente en el lugar dónde esté instalado.
El ahorro energético es una realidad cuando hablamos de los aparatos de última generación. Lo que pasa es que es cierto que para percibir de una manera evidente el ahorro lo ideal es que el resto de las estructuras estén en buen estado, como por ejemplo, que los cerramientos cumplan su función y no haya fugas. En cualquier caso, la sustitución de una antigua por cualquiera de las nuevas, sea cual sea su gama, será una mejora respecto a la seguridad y al consumo y eficiencia.
Cada dos años debe realizarse una revisión de la caldera por parte de un equipo acreditado. En Eco´-Cima ofrecemos este servicio a todos nuestros clientes y también quienes lo soliciten. Es el propietario de la instalación quien debe contactar con los técnicos y por eso es más práctico contratar un servicio de mantenimiento ya que entonces son los técnicos quienes llevan la cuenta y conciertan la cita sin necesidad de que el propietario tenga que acordarse.
En el caso de la instalación de gas, es la compañía suministradora quien debe revisar y acreditar que todo está en orden cada cinco años. El precio de esta revisión se incluye en la factura y nunca se debe pagar por él a los técnicos que lo hacen.
Ya hemos visto que hay diversos tipos de calderas. De gas, de gasoil, de biomasa, que funcionan por aerotermia… cada una con sus diferentes especificaciones. Lo mejor es confiar en la opinión de un técnico cualificado.
Nosotros podemos ayudarte a escoger la mejor para tu hogar o local, solo tienes que llamarnos y un miembro de nuestro equipo te podrá aconsejar. Pero si no quieres esperar, te explicamos un poco las diferencias entre ellas.
En general, las calderas de butano son adecuadas para climas cálidos en los que difícilmente se alcanzan temperaturas bajo cero. Las que funcionan con gas natural (o gas ciudad) solo pueden ser instaladas en aquellos lugares, normalmente en núcleos urbanos en los que existe una red general de conducciones.
Si vives en un lugar aislado, que no tiene acceso a la red de gas, y con temperaturas muy frías, quizás lo más adecuado para ti sea la caldera de gasoil.
Las eléctricas necesitan de una buena potencia eléctrica y que esta sea además sostenida, por lo que suelen instalarse en zonas urbanas o en aquellas rurales en las que se disponga de una buena red eléctrica.
Las de biomasa son adecuadas para espacios amplios que además estén cerca de una fuente de suministro o que sea fácil acceder a ellos.
Si estás pensando en comprar una caldera de gas quizás te inquiete la seguridad de las mismas, debido a que a veces vemos noticias que hablan de explosiones. No deberías preocuparte: una caldera moderna, instalada por un profesional y correctamente mantenida es absolutamente segura.
Trabajamos solo con las mejores marcas del mercado. Líderes que ofrecen las mejores prestaciones y la mayor garantía como Saunier Duval, Vaillant, Junkers o Baxi. En nuestra web puedes consultar los modelos y los precios de las calderas. Y sabes que si lo necesitas, puedes contar con nuestros servicios de instalación y mantenimiento para no tener que preocuparte por nada.